La excursion con Chiqui y Raúl

La semana pasada estuvimos trabajando y  haciendo un barco con un tetrabrick de leche, una lata de coca cola,  una vela de cera y dos pajitas, construimos un barco de vapor que se movía por el agua gracias al vapor de agua al calentar con la vela la chapa de la lata de coca-cola.
 El viernes llegué al instituto y como mis compañeros no vinieron me puse con Sara a hacer raíces cuadradas y actividades de percepción, razonamiento y cálculo y a segunda hora llegó Chiqui y al ver que no estaban mis compañeros, terminamos el barco y me preguntó que si tenía ganas de montar en bicicleta y le dije que sí y  entonces cogimos el barco y fuimos caminando dando un paseo hasta el Campo de las Naciones, allí nos pusimos a probar el barco  y aunque teníamos nuestras dudas, al final funcionó y luego nos fuimos directamente a montar en bicicleta.  Nos lo pasamos fenomenal, mucho mejor que si nos hubiéramos quedado en clase. Por eso pensé que mi profe se merecía una Coca-cola y le invité a una, me dio 50 veces las gracias porque después de las bicis le estaba sentando genial beber una coca-cola fresca. Le doy las gracias a Chiqui por haberse portado tan bien conmigo.
Para haber estado sólo ese día fue un buen día de instituto, llegamos justo a tiempo antes de que tocara el timbre al instituto y le contamos a Sara lo bien que lo habíamos pasado.